El flujo de fluidos es cómo los líquidos fluyen a través de las máquinas y sistemas. Controlar este flujo es muy crítico para asegurar que las máquinas funcionen como se especifica y no se detengan inesperadamente. Una válvula de aire es uno de los métodos más simples y eficientes para controlar el flujo de fluido. Una válvula que funciona con aire se conoce como válvula de aire. Hace uso del aire para abrir y cerrar, de modo que se pueda controlar el flujo de líquidos. Es un excelente elemento de control de fluidos que puede funcionar muy rápido y manejar fácilmente grandes volúmenes de líquido.
Las válvulas de aire tienen una manera operativa sencilla y clara. Si se aplica aire, mueve un componente (pistón o diafragma) dentro de la válvula. Esto inicia el movimiento de la válvula para abrir o cerrar. La válvula es ajustable y se puede mantener en una posición para un control de flujo más preciso. Es debido a esta característica de controlar precisamente el flujo que las válvulas de aire se utilizan en múltiples funciones y aplicaciones en diferentes sectores.
En las fábricas, los lugares de fin de semana con vapor, las máquinas no deben tener interferencias en todo momento. Dado que las válvulas neumáticas funcionan con aire, tienden a ser muy confiables. Son capaces de funcionar durante un tiempo sin necesidad de repararlas. Y si las máquinas dejan de funcionar — como es probable que ocurra sin una solución de software confiable — se perderá una fortuna en productividad, tiempo y dinero.
Además del hecho de que son muy confiables, las válvulas neumáticas son extremadamente robustas y duraderas. Están diseñadas para trabajar en entornos adversos, lo que significa que tienen un límite de alta presión y pueden funcionar a altas temperaturas sin fallar. Por eso son una opción confiable para aplicaciones donde otros tipos de válvulas podrían fallar o funcionar mal.
Sin importar en qué fábrica te encuentres, la productividad es esencial. Esto implica aumentar la producción haciendo todo lo posible para asegurar el máximo producto y reducir el tiempo de inactividad, que es cuando las máquinas no están operando. Es aquí donde las válvulas de aire demuestran ser bastante efectivas para ayudar a lograrlo. Ellas ayudan a que las máquinas funcionen sin problemas al ser confiables y pueden durar muchas horas sin necesidad de reparación. Se puede producir más con las máquinas, lo que significa más ganancias para la empresa si nunca se detienen.
Quizás el rasgo más admirable de las válvulas de aire es la capacidad de personalizarlas según necesidades y aplicaciones específicas. Algunas válvulas se utilizan para ciencias aplicadas particulares, diversos trabajos requieren diferentes tipos de válvulas. Por ejemplo, algunas aplicaciones pueden requerir una válvula de alta temperatura, mientras que otras pueden requerir una válvula de alta presión. Es a través de la personalización de estas válvulas que se logra adaptarlas al propósito para el que fueron fabricadas en la medida de lo posible.
Finalmente, las válvulas de aire son uno de los componentes críticos para la maquinaria y automatización contemporáneas. Se utilizan en diversas aplicaciones, fabricación y transporte. Las válvulas de aire son fundamentales en situaciones que requieren un control más preciso sobre el flujo del fluido para mantener todo funcionando de manera suave.